Petada: salida domingo 26

Creo que desde que me dio la pájara cuando aún tenía bici de carretera (yo era joven y tenía hasta pelo, ja, ja, ja, ja) allá por lo noventa, ¡Dios que viejuno estoy! Bueno pues contra todo pronóstico salimos con los Arrastraculos y deciden subir hasta Asuán, digo contra todo pronóstico porque pensabamos hacer las Ermitas, llegar a Trassierra, tomar un cafetito juntos y de vuelta deprisita que hassse calor, pero ahí que unos tiran por carretera y yo que no me apetece mucho lo del asfalto decido ir con el grupo, o más bien siguiendo en la distancia al grupo, pero sin soltar la tierrecita. Ese fue un gran error. No dormir, pasar de los cuarenta (interpretaciones varias, grados y añitos) y hacer mtb, no es que sea muy compatible en mi opinión. Resultado, cuando subíamos por los eucaliptos ya notaba que lago fallaba y al dejar la primera curva y empezar con los regueros, estaba claro que hoy no era mi día. Creo que no he empujado más a la burra en toda mi vida. Me caían unos goterones de sudor que no eran normales y las piernas se me volvieron de chicle. No debía tener muy buena cara cuando llegué a Asuán porque la gente no me insistió mucho y yo tampoco les di muchas opciones (eso, que es muy bonito, o bien que estabán hasta los mismísimos de esperarme claro y querían pirarse ya, pero ya, ya) así que carreterita para abajo que además me notaba empanado como para meterme a hacer baches o piedrecitas, seguro que e la hubiera dado de todas todas. Llego a casa, me zampo dos tostadas y nos cuantos litros de agua me siento un momento y echo la cabeza hacia atrás y cuando acuerdo me he quedado dormido. ¡Si es que estamos ya muy mayores para estas cosas! En fin una cosa más para chismorrear en la piscina. Resto de gente, Trassierra, Arturo que pinchó dos veces y casita sobre las 12:30, creo. Yo a partir de ahora, todo lo que sea salir más tarde de las 8:00, paso. El verano ya está aquí (leer con voz de la niña rubita de Poltergeist). Nos vemos