¡Qué pedazo de día que ha hecho después de los días de lluvia que hemos pasado! Sin duda el protagonista de la jornada ha sido el sol y el campo. En la ruta que hemos realizado el suelo no estaba demasiado encharcado con lo que hemos disfrutado mucho. Salimos de la Butipán con los Arrastraculos y marchamos dirección Chinales donde al llegar a las Brisas unos bajan por el acerado y otros por los escalones en la ladera, pasamos por la cementera y dirección la Ermita de Linares, unos tomán atajos por el campo y otros por la carretera hasta la Cañada Soriana, donde empezamos a subir dirección la Loma de los Escalones. Como vamos bastantes hay algún que otro atasco y que te hace poner pie a tierra cuando crees que puedes llegar algo más arriba. Por cierto una moto que subía a la vez que nosotros volcó y golpearon sin consecuencias a uno de los arrastraculos. Mi problema con la empañadura de las gafas se repite y decido quitármelas, casi peor, veo bien pero imposible prever el trazado a seguir pues yo lo que no veo es de lejos, no de cerca, así que mismo problema con los escalones de piedra, aunque empiezo a verme más suelto subiendo algunas de las piedras. Al llegar a Villa Enriqueta
un grupo vuelve por la carretera dirección Córdoba con un compañero que tenía problemas mecánicos (por supuesto todos hicimos bromas sobre su Mondraker)
y el resto continúa hacía la Virgencita dirección el Muriano. Antes de culminar giramos a la izquierda y subimos por la cuesta que da nombre al club, Arrastraculos con un 26% de pendiente, aunque el terreno está muy bien el esfuerzo de la loma se acusa y a un metro de culminarla pongo pie a tierra. Al entrar en la desviación Pablo que esta tarde coge el tren para Madrid decide que es hora de coger el camino de vuelta y pasar unas horas más con la familia. Seguimos ahora dirección Los Villares por carretera y se acusa el esfuerzo en la subida hasta el la entrada al parque periurbano y yo me voy quedando atrás del grupo de cabeza y cogiendo mi ritmo porque veo que si no no llego, pequeña parada para reagruparnos con el otro grupo
y cambiar impresiones sobre la eterna discusión "dobles o rígidas"
Jesús, Rafa, un par de arrastraculos y yo decidimos seguir por la carretera del 14% y bajar hacia Córdoba, ya se ha hecho algo tarde llevamos 2:40 horas dándole al tango y va siendo hora de volver. Bajando me quedo un tanto atrás porque voy bastante distraido y en alguna que otra curva tengo que tirar de frenada. Al llegar al barrio Rafa nos sorprende y propone darle un lavado a la bici, nos miramos los bolsillos porque en el estado en que está no sabemos si tendremos dinero para quitarle el barro acoplado en la tija, ja, ja, ja ¡qué malos somos! ahora que verás la próxima salida, entre el peso extra menos y la ganancia en aerodinamismo, cualquiera le echa el guante a Rafa. Bueno la semana que viene puentazo y si el tiempo lo permite estaré pegando bicicletazos en Ayamonte y si no ya nos veremos, un saludo hasta entonces,
José
